viernes, 18 de junio de 2010

EL PROBLEMA DE ESPAÑA


El pasado miércoles, la selección española debutó en el mundial de fútbol con una inesperada derrota. Derrota dolorosa, pero no definitiva que, sin embargo, me sirve para explicar cuál, considero yo, que es el verdadero problema que tenemos en España y que se refleja en todos los ámbitos. Y es que NO CREEMOS EN NOSOTROS MISMOS. Mi generación ha crecido con ese fatalismo tan español que aseguraba que "si es español seguro que es malo". No creemos en nuestros productos, no creemos en nuestra cultura, no creemos en nuestro cine, no creemos en nuestras empresas, en definitiva, no creemos en lo nuestro, no creemos en España, y en los tiempos que corren se nota aún más. Y es más, un país que cree en sí mismo es un país que tiene optimismo en el futuro y nosotros parece que no lo tenemos.

El milagro español, que así se le llamó al increíble despertar económico de España en las dos últimas décadas del siglo XX, no nos ha hecho cambiar de opinión. Seguimos pensando que lo de fuera es mejor, e insisto, la recuperación pasa por creer en nuestras posibilidades. A nadie parece importarle que seamos el primer país en numero de transplantes del mundo, o que tengamos una sanidad pública de calidad, o que seamos un país tolerante, o que seamos uno de los países con mayor esperanza de vida. Lo bueno parece que no importa cuando nos referimos a España. La dictadura hizo mucho daño en muchísimos aspectos. Y uno es este, hay una gran desafección hacia lo que representa España, de ahí este pesimismo.
¿Quién no ha escuchado a algún conocido utilizar el término "españolada" para referirse a una película española?, evidentemente utilizado de manera despectiva. Y eso sigue sucediendo aunque tengamos los mejores directores, los mejores actores y las mejores películas de Europa. Y no lo digo yo, sino que nos lo dicen desde fuera. Parece que necesitamos que desde fuera de España se nos diga que es bueno para que nosotros entonces lo creamos.

Este pesimismo español parece que lo arrastramos desde la pérdida de las últimas colonias de América, en aquel fatídico año 1898 y que titulamos como "desastre".
Pero a pesar de que hoy en día somos un país moderno, equiparable en muchos aspectos al resto de países europeos, mejor en otros aspectos, aunque evidentemente con defectos y problemas, nosotros erre que erre.

Otra frase que a mí en particular me fastidia mucho, "Esto es España" que se dice cuando te comentan algo negativo que le ha acontecido a alguien. O "España es así", cuando pretendes reflejar cierta resignación ante un hecho que te ha sucedido.

¡Basta ya hombre de tanta tontería! Claro que tenemos cosas que mejorar, pero ¿es que Francia o Alemania, por ejemplo, no tienen también cosas en las que mejorar? Por supuesto que sí, pero ellos confían en sus posibilidades.
Ni cuando las cosas iban bien, esto era el paraíso, ni ahora que la crisis nos ha golpeado duramente somos un desastre.

Y en el fútbol nos ha pasado un poco esto, nos sale un mal partido y es el fin. Hemos pasado de la gloria al desastre en 90 minutos. No es justo. Esperemos a ver como termina esto. Yo opto por lo que una vez dijo el que fuera primer ministro británico durante la 2ª Guerra Mundial, Winston Churchill,"Soy optimista, no parece muy útil ser otra cosa".

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